Más de seis millones de personas en Guatemala, aproximadamente el 35% de la población del país, carecen de acceso a servicios básicos de salud y nutrición.
Las actividades sanitarias de USAID capacitan a las comunidades para mejorar la accesibilidad de los servicios sanitarios y reducir las desigualdades; gestionan la calidad de los servicios de salud y nutrición a través del liderazgo local, y apoyan al sistema sanitario guatemalteco para que adopte enfoques sostenibles para movilizar y utilizar sus recursos de forma eficiente, eficaz y transparente.
CONTEXTO Y DESAFÍOS
Guatemala tiene la tasa de retraso en crecimiento más alta del hemisferio occidental y la quinta más alta del mundo, con casi la mitad de los niños menores de cinco años con retraso en el crecimiento y una tasa de mortalidad materna de 113 muertes por cada 100.000 nacidos vivos. Las desigualdades son el motor de los problemas de salud y nutrición en Guatemala, donde las poblaciones indígenas tienen los niveles educativos más bajos, viven en la pobreza y se ven afectadas de forma desproporcionada. Entre los niños indígenas menores de cinco años, las tasas de retraso del crecimiento alcanzan el 70%, mientras que el riesgo de mortalidad materna en las mujeres indígenas es más del doble que el de las mujeres no indígenas (RMM de 156 frente a 75 muertes por 100.000 nacidos vivos, respectivamente). Las elevadas tasas de embarazo adolescente (una de cada cinco niñas a nivel nacional ha dado a luz antes de los 19 años, una de cada cuatro en el Altiplano Occidental) agravan aún más el abultamiento juvenil de Guatemala y complican las oportunidades educativas y económicas de los padres jóvenes. La pandemia de COVID-19 ha puesto de relieve los problemas de los sistemas de salud que persisten en Guatemala y ha provocado retrocesos en todos estos indicadores. Guatemala también carece de intervenciones de vigilancia, laboratorio y sistemas para prevenir, detectar y responder al próximo brote.
CAPACITAR A LAS COMUNIDADES PARA HACER FRENTE A LA DESIGUALDAD
A través de los trabajadores salubristas de las comunidades, los programas de USAID alcanza a madres y niños con atención sanitaria primaria, como la promoción de la planificación familiar, las pruebas prenatales y postnatales, el desarrollo de planes para el parto, el control del crecimiento, la vacunación y el tratamiento de enfermedades infantiles como la diarrea y la neumonía. USAID también apoya la comunicación para el cambio de comportamiento social con el fin de fomentar conductas sanitarias, como la lactancia materna temprana y exclusiva, el lavado de manos y la mejora de las prácticas de alimentación infantil. Para reforzar los esfuerzos de divulgación, los trabajadores de salud también trabajan con padres, abuelas y líderes comunitarios para influir positivamente en las normas de la comunidad.
USAID también trabaja con grupos de la sociedad civil para abogar por un mejor acceso a los servicios de salud y nutrición. Los grupos dirigidos por jóvenes trabajan con el Ministerio de Salud Pública para mejorar los servicios adaptados a los adolescentes y dirigir intervenciones para prevenir la violencia de género en las comunidades. Los grupos dirigidos por hombres empoderan a sus compañeros para que sean padres responsables y abordan las normas de género perjudiciales que perpetúan la violencia de género. Los grupos de mujeres indígenas trabajan con el Ministerio para promover un mayor acceso a servicios de salud y nutrición culturalmente apropiados en sus comunidades.
MEJORA DE LA CALIDAD A NIVEL LOCAL
USAID apoya al Gobierno de Guatemala para que avance en su programa de descentralización. Por ejemplo, USAID trabaja en los municipios y las comunidades para desarrollar y aplicar estrategias que garanticen el acceso a los servicios de agua potable y saneamiento, y la mejora de la supervisión de la calidad del agua. USAID colabora con las direcciones de salud de las áreas locales para revisar sistemáticamente los datos sobre enfermedades infecciosas y prestación de servicios sanitarios rutinarios con el fin de priorizar las intervenciones de mejora de la calidad. USAID colabora con universidades privadas y el Ministerio de Salud Pública para ofrecer becas a mujeres indígenas jóvenes para que se especialicen como parteras profesionales. Las graduadas son colocadas en puestos de trabajo permanentes para mejorar la calidad de los servicios para mujeres embarazadas y niños a través de una atención culturalmente competente. Además, USAID trabaja con grupos de la sociedad civil para llevar a cabo un seguimiento dirigido por la comunidad de la disponibilidad y la calidad de los servicios sanitarios, los medicamentos y los suministros.
ASIGNACIÓN DE RECURSOS EFICIENTE, EFICAZ Y TRANSPARENTE
USAID está apoyando actualmente al Ministerio de Salud Pública para restablecer el sistema de atención primaria de salud. A través de este esfuerzo, USAID está ayudando a desarrollar el modelo, analizando costes y evaluando herramientas y sistemas para mejorar la eficacia del sistema sanitario. USAID también trabaja con el Ministerio para reforzar los sistemas de información sanitaria y el análisis de datos, con el fin de facilitar datos para la toma de decisiones y fomentar así una mayor transparencia. USAID también está apoyando a nivel nacional al Ministerio de Salud Pública para desarrollar herramientas y sistemas que permitan una mayor descentralización de los servicios de salud y nutrición. Al mismo tiempo, USAID está apoyando a las organizaciones de la sociedad civil para abogar por la transparencia y una mayor asignación de recursos para las inversiones en planificación familiar, nutrición y salud materna e infantil.
PREVENIR, DETECTAR Y RESPONDER A LOS BROTES DE ENFERMEDADES INFECCIOSAS
USAID apoya actualmente al Ministerio de Salud Pública para responder a la pandemia mundial de COVID-19. El objetivo actual es ampliar el alcance del sistema sanitario para vacunar a las comunidades desatendidas que viven en regiones predominantemente indígenas y rurales. Reconociendo que casi el 75% de todas las enfermedades nuevas, emergentes o reemergentes que afectan a los seres humanos a principios del siglo XXI se han originado en los animales, USAID trabaja para fortalecer las capacidades multisectoriales de Guatemala en la reducción del riesgo y el impacto de las amenazas de enfermedades zoonóticas que son de mayor preocupación para la salud pública. El programa hace hincapié en el fortalecimiento de los sistemas a nivel nacional y sub-nacional, y en múltiples sectores para la preparación (laboratorio, vigilancia, mano de obra, comunicaciones de riesgo, cadena de suministro y contramedidas relacionadas). USAID adopta el enfoque de "Una Sola Salud", reconociendo el papel fundamental que desempeñan la fauna salvaje, el ganado, otros animales domésticos y el medio ambiente en las enfermedades zoonóticas emergentes con potencial pandémico y resistencia a los antimicrobianos.
Programas
- Soluciones Innovadoras para Cadenas de Valor Agrícolas
- Cabras para la prosperidad
- Breakthrough Action
- Comunidades Liderando su Desarrollo
- Salud y nutrición
- Juntos mejoramos tu escuela
- Agua Saneamiento e Higiene Integral I-WASH
- Cumplimiento de objetivos y mantenimiento del control de epidemias (EpiC)
- Campaña de Comunicación de Prevención MPOX